Suena mi reloj. Son las 07:05. Mi corazón late despacio, una, quizá dos veces. Puedo sentirlo, queriendo salirse de mi pecho. Y entonces, los recuerdos. Hace pocos meses acudían en cascada: ese sentimiento arrasador de "algo va muy mal". Ahora es diferente, mas dulce, menos salvaje. Sonrisas, sábanas, cigarros y melodías se funden en colores sobre mi cabeza.
Y entonces, en ese momento, recuerdo lo que ella dijo tan solo anoche: "te ha quedado toda la vida para ser feliz." Y de alguna manera, se que tiene razón. Despues ya puedo abrir los ojos y mirar la luz del Sol filtrandose por las persianas. Estoy cansado. No me quiero levantar.
Pero me levanto.
suena: Nacho Vegas - La Plaza de la Soledad
No hay comentarios:
Publicar un comentario