Resulta sorprendente y sonrojante a veces lo poco que importan los deseos, la vida y las ilusiones de las personas. En el moderno entorno laboral que nos hemos inventado entre todos, parece que solo importa el aquí y ahora. Puedes haber realizado esfuerzos, aportado ideas, demostrado interés...nada de eso tiene el mínimo peso, eres prescindible y un estúpido con gorra puede cambiar tu vida en cinco minutos, destrozar tus ilusiones y perturbar tu estado vital.
Nada hay mas peligroso que un tonto con ínfulas de grandeza. Porque los humanos somos así, nos dan galones y nos transformamos en mano ejecutora de los planes imperialistas de tipos mucho mas listos y ambiciosos que nosotros....tipos que, por supuesto, una vez les hayamos hecho el trabajo sucio, no tendrán problema en desembarazarse de nosotros.
Maldito sea el momento en el que perdimos la conciencia de clase.
suena: Chris Isaak - Shadows in a mirror
No hay comentarios:
Publicar un comentario