No deja de ser indignante. A falta de dos meses para las elecciones generales, el Ministerio de Asuntos Sociales desembarca en todos los medios con una espectacular campaña sobre la "subida de las pensiones" donde por supuesto no se olvidan de anunciar a bombo y platillo un suplemento especial a los pensionistas para "compensar por la subida de precios del 2003". Para mas inri, todo sufragado con dinero del estado. El PP compra sus votos con tu dinero.
Lo peor es que hemos llegado a un estado de las cosas en el cual ya ni siquiera nos escandaliza. De hecho, ni siquiera nos extraña. El partido que gobierna desde 1996 ha conseguido que le identifiquemos de tal manera con los recursos del pais que los maneja tal y como si le perteneciesen por derecho propio. El perjuicio que ha causado este Gobierno a todos tardará muchos años en recuperarse.
Y lo peor, es que no parece que haya alternativa posible. Las pocas iniciativas interesantes que surgen del PSOE son inmediatamente acogotadas por algunos elementos propios del partido que están mas interesados en hacer fracasar a su lider que en ganar las elecciones (veanse las declaraciones "made in Ibarra" sobre el 5% necesario de reprensentación para poder tener diputados en el Congreso). Desde la filas de IU también se intuyen al menos unas ganas de cambiar las cosas, pero hoy por hoy, no son percibidos como un partido de Gobierno, amen de que sus secciones en Comunidades históricas parecen mas interesadas en sus propios localismos que en plantear una alternativa seria.
Por último, el giro radical de la mayoría de los partidos nacionalistas a petición de sus propios electores (y causado, no nos engañemos por la posición frentista del PP) practicamente los inhabilita a todos como socios válidos de cara a un Gobierno eficaz de futuro. Si lo que se pretende es recuperar el estado normal de las cosas, tras la etapa negra del PP, será necesario trabajar todos con ese objetivo común, algo que no parece estar en el punto de mira a corto plazo de ninguno de los partidos nacionalistas.
En estas condiciones, arranca una campaña decisiva, en la que segun el partido del Gobierno "convocar un debate cara a cara sería electoralista". Nuestra democracia, en sus horas mas bajas.
suena: Chris Rea - The Road To Hell
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